La Sunna del Fayer es la primera del día que el musulmán realiza en su rutina. Y esta Sunna, comprende varias otras sunnas. Antes de describirlas, creo pertinente mencionar primero las sunnas permanentes que el musulmán realiza conjuntamente con las oraciones obligatorias, cuyo número de rakas es doce. Umm Habiba (que Al-lah esté complacido con ella) dijo: “Escuché decir al Mensajero de Al-lah (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él): “A quien rece doce rakas durante el día, Al-lah el Majestuoso y Sublime, le construirá una casa en el Paraíso” (Tirmidhi 415 y lo declaró: Hasan Sahih).
Zaid Ibn Zabit (que Al-lah esté complacido con él) narró que el Mensajero de Al-lah (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “¡Oh gente! Realicen sus oraciones (voluntarias) en sus hogares, puesto que la mejor oración es aquella que se realiza en el hogar, excepto las oraciones obligatorias” (Bujari 7290 y Muslim 781).
La más importante de las sunnas cotidianas son las dos rakas antes del Fayer, según los siguientes hadices: a) Aisha (que Al-lah esté complacido con ella) dijo: “No dejaba las dos rakas de antes del Fayer bajo ninguna circunstancia” (Bujari 1196 y Muslim 724). b) Aisha, (que Al-lah esté complacido con ella) narró que el Profeta dijo: “Las dos rakas del Fayer son mejores que el mundo entero” (Muslim 725).
La Sunna del Fayer incluye varios asuntos: Primero. Su legalidad durante el viaje o la residencia como ya hemos explicado. En cuanto a las demás sunnas, es preferible no hacerlas durante el viaje, como las sunnas de las oraciones del mediodía, del anochecer y de la noche.
La Sunna del Fayer incluye varios asuntos: Tercero. Es preferible la brevedad al realizarlas, tal y como indica el siguiente texto: Aisha (que Al-lah esté complacido con ella) dijo: “El Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía realizar las dos rakas que preceden la oración del Fayer con tal rapidez que me quedaba la inquietud de si había recitado Al Fátiha o no” (Bujari 1171 y Muslim 724). Sin embargo, el realizarla con rapidez no debe conllevar al extremo de arruinar la oración por dejar de cumplir con sus pilares.
La Sunna del Fayer incluye varios asuntos: Cuarto. Es Sunna recitar el capítulo de Al Kafirún (108) en la primera raka después de Al Fátiha y leer el capítulo de Al Ijlás (112) en la segunda. Alternativamente, la persona puede recitar en la primera raka: {Digan: “Creemos en Al-lah, en lo que nos fue revelado a nosotros, en lo que fue revelado a Abraham, a Ismael, a Isaac, a Jacob y a las tribus, y en lo que Al-lah reveló a Moisés, a Jesús y a los demás Profetas. No discriminamos entre ellos, y entregamos a Al-lah nuestra voluntad [siendo musulmanes]} [Corán 2:136]. En la segunda raka, puede recitar: {Di: “¡Oh, Gente del Libro! Convengamos en una creencia común: No adoraremos sino a Al-lah, no Le asociaremos nada y no tomaremos a nadie como divinidad fuera de Al-lah”. Pero si no aceptan digan: “Sean testigos de que nosotros solo adoramos a Al-lah”} [Corán 3:64]. Según el relato de Abdullah Bin ‘Abbas registrado en Sahih Muslim, el Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) a veces recitaba en la segunda raka el versículo 52 de la sura 3.
La Sunna del Fayer incluye varios asuntos: Quinto. Es Sunna recostarse sobre el costado derecho después de terminar la oración Sunna del Fayer. La evidencia: Aisha (que Al-lah esté complacido con ella) narró que: “El Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) se recostaba sobre su costado derecho cuando terminaba de realizar las dos rakas de la Sunna del Fayer” (Bujari 1160 y Muslim 736).
Yabir Ibn Samura (que Al-lah esté complacido con él) narró: “El Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía quedarse sentado en su lugar en la mezquita con las piernas entrecruzadas hasta que amanecía completamente” (Muslim 670).